Descripción
Su elemento calefactor integrado ofrece una mayor transferencia del calor y tiene una vida más larga que otros equipos. Diseñados para operar a una temperatura máxima de 400 °C y 500 °C, útil en numerosas rutinas de calentamiento de laboratorio. Su fuerte estructura les permite resistir el uso repetido y rudo. Disponibles en modelos sencillos, dobles o cuádruples, con plato de aluminio o de acero inoxidable.